viernes, 3 de junio de 2011

MENSAJE DEL TERCER ÁNGEL

3ª PARTE:
 LA PROCLAMCIÓN DEL TERCER ÁNGEL
"  Y el tercer ángel los siguió diciendo a gran voz:  " Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe su marca en su frente o en su mano, este también beberá del vino de la ira de Dios, vaciado puro en la copa de su ira. Y será atormentado con fuego y azufre ante los santos ángeles y ante el Cordero. Y el humo de su tormento sube para siempre jamás. Y los que adoran a la bestia y a su imagen, y los que reciben la marca de su nombre, no tienen reposo ni de dia ni de noche " ( Apocalipsis 14: 9-11)

  El tercer mensaje es el complemento de los otros dos y también se da en alta voz.  Señala cuál será el resultado de desobedecer a Dios y de adorar al poder que se representa asímbolicamente como bestia.

  En los tres mensajes vemos una relaciíon lógica, ya que los tres señalan el cumplimiento de las palabras de Jesús registradas en San Marcos 13: 10 ; "Y primero tiene que ser predicado el evangelio a todas las naciones ", ya que en los últimos días, la predicación del evangelio eterno es el punto focal de todas las señales que nos indican que nos acercamos al fin de todas las cosas.


                  La marca de la bestia o el sello de Dios 
  El mensaje del primer ángel presenta el evangelio etrerno y es una invitación para aceptarlo y para adorar al Dios Creador, tal como él instituyó en el mismo Edén, antes de la entrada del pecado.  El mensaje del segundo ángel nos amonesta contra el falso evangelio de llegar a ser justificados por los méritos de nuestras obras, que es el "evangelio" de Babilonia, la que se dice que cayó, y por lo tanto es una advertencia.  El mensaje del tercer ángel señala la necesidad de elegir a quién adorar, y es una profecía de lo que sucederá en cada caso.

  Los tres ángeles nos hablan de juicio a diferentes niveles.  El primero lo presenta en términos generales:  todos deberán afrontarlo. Se dice que la hora de su juicio ha llegado.  El segundo mensaje se centra en el juicio inminente de la religión falsa de Babilonia, que ha sustituido muchas de las doctrinas divinas por otras de factura humana.  Y el mensaje del tercer ángel, describe el día de la polarización, cuando los hombres sufrirtán, debido al veredicto del poder representado por la bestia, un poder que llama a adorar y por lo tanto es religioso, o por el veredicto final de Cristo, si desobedecemos su llamamiento.


  El mensaje del tercer ángel lleva a su culminación el conflicto entre Dios y su gran enemigo en la historia de la redención cuando exhorta a cada uno a no adorar a la bestia ni a su estatua o imagen, y amonesta a todos del peligro que corren si adoran a la bestia. Los que adoran a la bestia tienen su marca de propiedad sobre ellos como los seguidores de Jesús tienen el sello de Dios, indicando que son posesión de Dios.  No hay neutralidad. Usted tendrá o la marca de la bestia o el sello de Dios, de acuerdo a su propia elección. Es verdad que hay una diferencia fundamental en estos sistemas rivales de adoración que cada ser humano podrá constatar : la bestia usa la coerción, como se desprende  de lo que Apocalipsis dice en el capítulo 13: 16: " y hace que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esc lavos, les pongan una marca en su mano derecha, o en su frente". En cambio Cristo usa la persuación, ya que el sello de Dios solo se coloca en la frente, ( Apocalipsis 7: 3 ) El sello de Dios solo se colca en la frente, porque Dios nunca fuerza la voluntad del hombre.


  El sello de Dios es colcado en los creyentes por el Espíritu Santo, que los sella para el día de la redención, como dice San Pablo en Efesios 4. 30. y ahora es el momento de prepararse, ya que ese sello será colocado solo sobre los creyentes fieles.


   Es concluyente que tanto Dios como Satanás consideran esta exhortación universal apocalíptica a la adoración, como algo de suma importancia y seriedad, ya que ambos envían sus tres mensajeros a todo el mundo habitado, y nadie puede permanecer neutral o ignorante en esta hora final de decisión ( Apocalipsis 14: 6-11;  16: 13-14 )

  El tercer ángel pronuncia una advertencia a todos los que pueden ser conquistados por la persuación de la bestia y aceptan su marca, porque aunque no estén activamente compremetidos con el mal, si tienen la marca de la bestia deben compartir su castigo.  Por primera vez en la historia, los juicios de Dios caerán sin mezcla de misericordia, y es una referencia a las siete últimas plagas que presenta el Apocalipsis en el capítulo 16.


  Al tomar la marca de la bestia, ya sea en la frente, por aparente convicció, o en la mano, por lo que puede entenderse como conveniencia, indica que el que la toma está dispuesto a adorar a la bestia en lugar de adorar a Dios, y por lo tanto debe correr con las consecuencias.  La marca de la bestia representa la esencia de la falsificación de la adoración, como una usurpación de algo que solo pertenece a Dios, y una sustitución.


                    Una amonestación solemne
   El mensaje del tercer ángel, al igual que el del primero, hace énfasis en la adoración, y la única adoración aceptable ante Dios es la que proviene de Dios y que se halla en la voluntad revelada de Dios, en las Sagradas Escrituras.  Tal vez podemos recordar en este contexto que el diablo quiso que el Hijo de Dios se postrara delante de él, en el monte de la tentación ( San Mateo 4: 9-10 ). 
Hoy el diablo nos coloca la misma tentación  y el mensaje del tercer ángel es explícito y terminante: si adoramos al enemigo de Dios, por más sinceros que seamos, ya tomemos la "masrca" en la frente, indicando aceptación plena, o en la mano, indicando conveniencia, nos encaminamos a la destrucción final, cuando la tierra sea purificada de todo mal.

  Esta amonestación solemne se le dirige a cada creyente y convoca a cada uno a permanecer fieme para no beber el vino del furor de la fornicación de Babilonia, y por lo tanto desarrolla en toda su fuerza y claridad el mensaje del segundo ángel, con el añadido de que los que adoren a la bestia tendrán que beber el vino de la ira de Dios.

  Se presenta aquí la "marca de la bestia", que es indudablemente la marca que identifica el culto de la adoración de ese poder poliítico-religioso, y que constituye un acto de idolatría. Es la falsificación del sello de Dios. Si tenemos en cuenta que el mensaje de los tres ángeles es llamamiento de Dios a la humanidad para volver al Creador, al Dios que representa las Sagradas Escrituras, la marca de la bestia es un llamamiento para alistarse en contra de Dios y de su pueblo.

                         Dios es amor ... y justicia 
  ¿ Cuál será la naturaleza del castigo del que adore a la bestia ?  El Apocalipsis nunca habla de una existencia interminable en un tormento que nunca se acaba.  Un Dios de amor nunca podría hacer eso.  Las Escrituras nos dice que " Dios es amor " ( 1 Juan 4: 8 )  que el propósito del fuego es consumir, no preservar. El símbolo del tormento que aparece en el mensaje del tercer ángel está tomado de la suerte de Somorra y Gomorra, las cuales no están ardiendo. aunque sufrieron el castigo del fuego eterno (Génesis 19: 38;  Judas 7: 2 ) y San Pedro nos dice que fueron reducidas a ceniza ( 2 Pedro 2: 6 ) Esto nos indica que el fuego se apagará cuando haya completado su obra de destrucción de todos los que se hayan rebelado contra Dios. Malaquías, el último profeta del Antiguo Testamento, lo describe gráficamente en estos términos : "Mirad que llega el día, ardiente como un horno, cuando arrogantes y malvados serán la paga : ese día futuro los abrasaré y no quedará de ellos ni rama ni raiz ... serán como polvo bajo la planta de nuestros pies" ( Malaquías 3: 19-20 ).


  Los mensajes concluyen con una declaración positiva: a pesar de la coalición de los poderes perseguidos encarnados en el símbolo apocalíptico de Babilonia o bestia, en el conflicto entre los dos sistemas rivales de adoración. Dios protege a los que se aferran lealmente a él, el remanente del tiempo del fin, la iglesia que tiene las mismas características que la iglesia apostólica.


  El triple mensaje angélico concluye diciendo:  "Aquí es ( donde se ve) la constancia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe en Jesús " .( Apocalipsis 14: 12 ) . Este pasaje es paralelo al de Apocalisis 12: 17 que dice de la descendencia de la mujer en el tiempo del fin " los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesús ".

   Este mensaje debe estar siendo proclamado por los creyentes de la fe que guardan los mandamientos de Dios y que constituyen un pueblo que apareció en el momento profético exacto para prepararse para la venida del Señor y predicar el evangelio eterno, el evangelio apostólico, sin mezcla de humanismo.  Este pueblo surgió a mitad del siglo XIX cuando el reloj profético comenzó la hora del juicio de Dios, y mantiene en alto las mismas verdades bíblicas que predicaron los santos apostólicos de nuestro Señor Jesucristo, por mencionar algunas: 

1- La inmutabilidad del Decálogo, que constituye l norma divina de conducta y la prueba irrefutable de que es la verdadera iglesia de Dios.

2- La observancia y santificación del séptimo día ( sábado ) como verdadero día de reposo instituido por Dios en el principio, y señal de salvación, santificación y redención .

3- La salvación por la fe en el sacrificio expiatorio de nuestro Señor Jesucristo. " Pues habéis sido salvados por la gracia a través de la fe "  escribió San Pablo ( Efesios 32: 8 ) 

4- La doctrina de la segunda venida de Cristo, que vendrá para poner fin a este mundo de pecado.